PROCEDENCIA:
Colección particular
 
Pradilla con una pincelada muy suelta y una paleta muy colorista nos sorprende con una instantánea de la Plaza de San marcos de Venecia, la ciudad que ha cautivado a casi todos los artsitas del siglo XIX e inspira a nuestro pintor por su romanticismo y belleza. La magnífica arquitectura veneciana queda reflejada perfectamente en sus edificios, destacando el Palacio Ducal, siguiendo la perspectiva la estatua del león alado de San Marcos que le da nombre a la plaza y al fondo el campanile, entre otros detalles. Con personajes sentados, de pie, las palomas dan vida a la escena.
Comparable con la obra Plaza de San Marcos, pintada en 1894, también de pequeño formato, recogida en catálogo razonado del pintor escrito por Wifredo Ricón, titulado plaza de San Marcos, pág. 262 (ilustrado en color) cat. 170, pág. 342 (ilustrado en b/n).